El alcohol y la muerte

Leyendo ayer la última parte de Luces de Bohemia, no pude evitar pensar en la relación entre el alcohol y la muerte. Me refiero, concretamente, el papel que puede tener la bebida en como lloramos a nuestros muertos. Ahogarnos en nuestras penas, en el dolor que nos causa la muerte de alguien a quien queremos. En cierto sentido, puede parecer una reacción lógica, este deseo de tapar nuestro congojo, pero sabemos, o debemos saber, que no funciona. Estar de luto solo en tu interior es como envenenarte. El veneno tiene que salir.  Me vinieron a la mente varias muertes de seres muy queridos en mi vida, pero sobre todo la de un gran amigo, a cuyo funeral asistí medio borracho. Siento pena al recordar esa tarde malagueña, pues yo no estaba, desde luego, a la altura de la circunstancias.